lunes, 12 de marzo de 2018

Harto de dolor


Oportunidades. Todos necesitamos al menos una oportunidad.

¿Tuvo Facundo alguna oportunidad? Si alguien puede responder a esta pregunta lo invito a que me ilumine.

Mi humilde y enojada opinión dice que no. No tuvo ninguna oportunidad. Nació en un lugar pobre sin oportunidades y a los once años un tiro en la nuca proveniente de la policía lo dejó tirado sobre el asfalto caliente.

¿Vale más el dolor de una abuela de un chico de once años asesinado, nacido bajo condiciones más favorables que el de una abuela de un chico de once años asesinado, nacido en condiciones de pobreza? Aquí también invito a quien pueda responder esta pregunta. Por mi parte digo que no. No vale más. La muerte es la muerte y el dolor es el dolor en todos los lugares por igual.

¿Quién de todos los que apoyan este tipo de justicia se anima a apretar el gatillo y disparar por la espalda a un nene de once años?

¿Por qué el policía disparó de la forma que disparó? ¿Qué fue lo que lo habilitó a disparar así, sin motivo alguno?  Por la espalda. Sin sentirse atacado. Cazando a alguien, a un chico, a un nene de once años.

Las fuerzas de seguridad son el brazo armado del estado. Las instituciones están a cargo de un gobierno. El gobierno está formado por personas con ideas. El conjunto de estas ideas dan forma a sus decisiones. Sus decisiones, entonces se amparan en una ideología. Y si esta ideología sostiene que su brazo armado tiene que matar según el criterio que utilice el que lleve un arma entonces estamos ante un gobierno peligroso. Porque mañana podes ser vos. Sí, vos también aunque estés lleno de oportunidades mañana te pegan un tiro por “cheto careta” la misma cana que le pego un tiro a Facundo por “negro villero”. ¿Me explico?

Un gobierno debe fortalecer las instituciones y crear un ámbito de seguridad jurídica, social, educativa, de salud. Esa es la verdadera seguridad.

Hoy estamos frente a la misma inseguridad sufrida por diferentes sectores de la sociedad: la inseguridad de que sus hijxs no vuelvan vivos a sus casas.

¿Acaso la abuela de Facundo no tiene el derecho de disfrutar de su nieto al igual que cualquier otra abuela? Sí lo tiene. Lo que no tiene es una oportunidad. Como tampoco la tuvo Facundo. Todos necesitamos oportunidades y cuando naces en un hogar sin ellas es el Estado el que debe proveerlas. Sí, tus impuestos tienen que servir para proveer de oportunidades a los que no las tienen. Solo así vas a poder disfrutar de la seguridad que tanto pedís. No viene de las armas. Nunca nada bueno salió de las armas.

Así como vos tal vez quieras que con tus impuestos se limpien las calles yo quiero que con los míos le den oportunidades a pibes como Facundo. No se trata de una cosa o la otra, se trata de las dos cosas. Veredas limpias y pibxs con oportunidades. Los impuestos, las instituciones, el estado y el gobierno están para proporcionarnos las dos cosas y más. De eso se trata cuando hablo de un estado presente.

Vengo de Brasil, allá el chofer de un Uber me contaba que su hijo de seis años no puede ir al colegio porque sale demasiado caro. Seis años y sin oportunidad. ¿Qué esperamos de el cuándo la primer puerta ya la tiene cerrada en las narices. Ya está cien escalones abajo del que puede pagar un colegio. 

Ahí tiene que estar el estado. Ahí tiene que estar un gobierno y decirle: acá tenes un colegio por el que no tenes que pagar. Lo público nos iguala en oportunidades. Nos hace mejor sociedad. Todos debemos tener derecho a comer, a vestirnos, a educarnos, a tener salud, a vivir mejor. Y si vivimos dentro de una sociedad capitalista necesitamos un mediador, alguien o algo que nos iguale con aquel que tiene mejores oportunidades no por ganárselas sino por haber tenido la suerte de nacer en un mejor hogar. Este mediador es el Estado. No me voy a cansar nunca de repetirlo. El estado es el que debe encargarse de proveernos a todos de oportunidades. Pero privilegiando al que menos tiene. Solo así habrá justicia. Solo así habrá seguridad. Yo por mi parte me siento orgulloso de que nuestro país brinde oportunidades a vecinos extranjeros que no las tienen. Vecinos que van a venir a estudiar y encima a consumir acá. Eso nos hace mejores. “Vení, estudiá acá que podes, sé mejor persona y construyamos igualdad juntos” Ese es el mensaje que debemos dar. Sentite orgulloso de la gratuidad de la educación, por ejemplo. Que eso te infle el pecho.

No se trata de cerrarse cada vez más. Se trata de abrirse. Abrir puertas a los que no pueden llegar al mismo lugar que nosotros. No pido nada para mí. Yo lo tengo todo. Pido para aquel que tiene que duplicar o triplicar sus esfuerzos para llegar donde yo estoy. Y no me vengan con “Si trabaja llega” porque no funciona así. Sabes que no es así. Qué casos como el de la película “En busca de la felicidad” solo hay uno porque sino: no se hubiese hecho una película. Ese caso corre por fuera de lo común. La vida de la mayoría no funciona así porque el capitalismo no crea puestos para todos por más esfuerzo que hagan.

¿Es tan complicado defender una vida? A Facundo una bala lo abortó a los once años. ¿Así lo entendes mejor? 

Nunca, nunca cazar humanos fue la solución a nada. Seamos maduros, busquemos soluciones mejores. Pensemos más. Seamos solidarios.

El dolor es el mismo en todas las familias. La muerte es la misma en todos los ámbitos. Solo se diferencian en algo: en las oportunidades que cada una tuvo para evitarla.

Yo a los once años llegaba del colegio a mi casa y le preguntaba a mi vieja que había de comer. Tenía oportunidades.

Pensá. Por favor, pensá.

Harto de dolor, ya es demasiado.